La desaparición y el asesinato de una niña de 14 años impulsaron a los legisladores de Arizona a aprobar la “Ley de Emily”, que establece una nueva alerta de emergencia para personas indígenas desaparecidas. La legislatura de Arizona había estado considerando un sistema de “Alerta Turquesa” cuando Emily Pike, una adolescente apache de San Carlos, fue encontrada asesinada después de que se denunciara su desaparición de un hogar de grupo a finales de enero. Su caso impulsó a los legisladores a modificar el proyecto de ley original para incluir a menores de 18 años y nombrar la legislación en su memoria. “No podemos permitir que los niños desaparezcan sin que se alerte a nadie”, dijo la representante Teresa Martínez, patrocinadora del proyecto de ley. La medida de Arizona sigue de cerca a una “Alerta Turquesa” que la Legislatura de Nuevo México aprobó por unanimidad. Las alertas, que funcionan de forma similar a una Alerta AMBER, proporcionan una respuesta rápida cuando se denuncia la desaparición de una persona indígena y existen pruebas de peligro inminente. Washington, California y Colorado tienen alertas similares
